A la hora de alcanzar la tan mentada libertad financiera, primero hay que estudiar y comprender cómo funcionan las finanzas, luego procurarse un ahorro y finalmente, poner a trabajar el dinero a nuestro favor para así multiplicar nuestra riqueza. En ese sentido, los denominados ingresos pasivos resultan fundamentales para lograr nuestro cometido.

Los ingresos pasivos son aquellos que se obtienen con poco o ningún esfuerzo, y a menudo, quienes lo obtienen lo hacen a través de una inversión.

Cuando el ingreso pasivo de un individuo es lo suficientemente grande, puede liberar su tiempo para hacer otras cosas además del trabajo, al tiempo que refuerza su seguridad financiera. 

¿Qué son los ingresos pasivos?

Los ingresos pasivos representan un flujo de entrada de dinero que requiere poco o casi ningún esfuerzo diario. Se puede crear ingresos pasivos de diversas maneras, siendo las más efectivas las inversiones o la creación de un negocio propio.

Después de identificar y establecer un flujo de ingresos pasivos, es probable que no necesite estar pendiente de ellos, lo cual no significa que en los inicios no tenga que prestarle atención.

Para poder gozar de los beneficios de percibir ingresos pasivos, casi siempre hay que realizar una inversión inicial, no solo de dinero, sino también de tiempo y otros recursos.

Asimismo, cabe destacar que en una etapa inicial, esto requiere cierto grado de supervisión o mantenimiento regular para mantener las cosas en orden.

A continuación, compartimos algunas de las formas más comunes en que los inversores pueden obtener ingresos pasivos.

Consejos para sumar ingresos pasivos

  • Entender la importancia de los ingresos pasivos 

La mayoría de nosotros trabaja activamente para percibir una remuneración, es decir: vive de ingresos activos. Si analizamos esto de manera literal, queda claro que un “ingreso activo” es aquel que precisa de nuestra presencia “activa” y trabajo incesante.

En contraposición, los ingresos pasivos son aquellos que se generan sin necesidad de trabajar de manera activa. Y si bien esto no significa que el dinero ingrese de manera mágica – ya que demanda presencia y compromiso, especialmente al comienzo-, dedicarse a generar este ingreso pasivo una vez alcanza para cobrar muchas veces.

Esto no solo refuerza la confianza, sino que también brinda una mayor seguridad financiera y más tiempo libre para disfrutar del esfuerzo y proyectos personales.

  • Reflexionar y cambiar nuestro sistema de creencias

Para poder lograr ingresos pasivos es conveniente plantearse algunas cuestiones. En una sociedad donde el “tiempo libre” es lo contrario al tiempo que pasamos trabajando para generar nuestro dinero, es importante tener en claro cómo queremos disfrutar de esas horas de ocio.

El primer paso para poder generar estas ganancias pasivas es entender qué se quiere hacer con el tiempo libre y si usted está verdaderamente preparado para cambiar su sistema de creencias que sostiene que la única forma de ser exitoso es trabajando arduamente en algo que no le satisface al 100%.

En una sociedad capitalista donde a las personas se les exige ser productivos casi todo el tiempo, vale la pena revisar cuáles son sus creencias ante el dinero. Si usted es de los que piensan que la única forma de ser exitoso es sufrir y esforzarse sobre manera, probablemente se termine convirtiendo en su realidad. 

Por el contrario, intente conectar con su verdadero deseo: ¿Qué desea conseguir con su arduo trabajo? ¿Qué haría si tuviera abundancia financiera? Allí encontrará respuestas inspiradoras y el motor inicial para poner en marcha su plan de generación de ingresos pasivos.

  • Buscar ejemplos de éxito e intentar replicarlos

Los ingresos pasivos son aquellos que fluyen por nuestra vida sin la necesidad de estar pendientes, por ende, nos proveen de más tiempo libre. Para poder llevar esto a cabo y gozar de los beneficios vale la pena mirar otros casos de éxito.

Cabe aclarar que existen varias formas de generar ingresos pasivos, y las principales diferencias radican en la riqueza inicial que se necesita para generarlos. Obtener ingresos a partir del alquiler de una vivienda, por ejemplo, requiere de haber juntado el capital necesario para ser dueño de esa propiedad.

Otro ejemplo muy popular a la hora de generar ingresos pasivos es invertir: sea en fondos comunes de inversión o en acciones, las inversiones son una forma muy eficiente de generar ingresos. Si bien se requiere cierto capital inicial para poder invertir, luego no se requiere ningún otro esfuerzo.

Construir un negocio propio requiere de un gran sacrificio pero es la forma perfecta de generar ingresos pasivos. Tras el esfuerzo inicial de ponerlo a punto y en funcionamiento, llegará el momento en el que usted podrá contratar empleados o un gerente de confianza para las labores diarias y así poder delegar y recibir las ganancias. 

Ideas de ingresos pasivos sin capital inicial

Sin embargo, para aquellos que no cuentan con el capital necesario como para adquirir una vivienda, invertir en los mercados o poner un negocio, existen otras alternativas.

En ese sentido, la tecnología es una excelente aliada ya que solo con contar con una conexión a internet se pueden hacer grandes cosas.

Compartir los saberes de alguna materia de su competencia dándole forma de curso o tutorial para luego venderlos en alguna tienda online puede generar un buen flujo de ingresos pasivos. En este caso, usted deberá invertir inicialmente en la creación del contenido, pero será un esfuerzo de una única vez.

Asimismo, el modelo se puede replicar con un canal de videos o un blog que, a medida que va generando tráfico, permite monetizar las visitas a través de una minima inversión en publicidad. Lo mismo sucede con algún podcast, entre otros ejemplos. 

Conclusiones

Una forma de ingresos pasivos, como ganar dividendos a partir de una inversión o el alquiler de una propiedad puede costar dinero por adelantado, pero la idea detrás de los ingresos pasivos es que genera nuevos ingresos sin la necesidad de dedicar demasiado esfuerzo. 

Una vez que un flujo de ingresos pasivos comienza a generar ganancias, queda a criterio de cada uno disfrutar del ocio o reinvertir esos ingresos en una nueva inversión. 

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