En el marco de una búsqueda de fortalecimiento de las relaciones bilaterales entre Argentina y Brasil, el ministro de Economía, Sergio Massa, confirmó el avance del proyecto “Sur”, una moneda común entre Argentina y Brasil. La flamante moneda busca fomentar el comercio internacional y se diferencia de las “monedas únicas”, ya que funcionará en paralelo al peso y al real, sin eliminar ninguna de las monedas nacionales.
Tras el regreso al poder, el presidente de Brasil, Luiz Inácio “Lula” Da Silva, ha dejado claro su interés en fortalecer la integración con los países del Mercosur. Así, una de sus primeras acciones fue reunirse con el presidente Alberto Fernández y otros funcionarios de gran peso para discutir el proyecto “Sur”.
MONEDA COMÚN: QUÉ SIGNIFICA
El proyecto de la moneda “Sur” tiene como objetivo la creación de una moneda común entre Argentina y Brasil. Esto significa que la misma no reemplazará al peso o al real, sino que se utilizará para fomentar proyectos comerciales, al menos en la primera etapa.
En diálogo con el medio británico Financial Times, Massa señaló que el objetivo de esta nueva moneda es estimular el comercio regional y reducir el uso y la dependencia del dólar americano. Además, el Ministro señaló al medio británico que, aunque en esta etapa se trata de una iniciativa bilateral, será ofrecido a otras naciones de la región.
El desembarco de la moneda “Sur” llega como una oportunidad de unificar criterios dentro de la región, con topes al déficit fiscal o el endeudamiento, que mirando otros casos de éxito, fueron la base de la construcción del euro.
HISTORIA DEL EURO: UN CASO DE ÉXITO
Si bien el proyecto “Sur” tiene una diferencia fundamental con el euro, y es que se trata de una moneda común, mas no única, siempre es interesante evaluar otros casos de éxito en la implementación de este tipo de instrumentos. Además, cabe señalar que el proyecto de una moneda común entre Argentina y Brasil recién comienza a dar sus primeros pasos. En tanto, en Europa, la implementación del Euro demoró casi 40 años.
El euro comenzó a regir como moneda única de los países miembro de la Unión Europea el 1 de enero de 1999. Sin embargo, era un proyecto en marcha desde la década de 1960. Después de muchas negociaciones (especialmente debido a la oposición del Reino Unido, en 1999 nació la moneda de forma virtual (para transacciones bancarias y demás) y en 2002 empezaron a circular billetes y monedas. El euro relevó rápidamente a las monedas nacionales de otros países y se fue extendiendo lentamente.
Hoy a más de 20 años de su desembarco, queda claro que la creación del Euro fue una decisión acertada. La introducción de esta moneda en los mercados constituyó en uno de los cambios más significativos de la historia. Hoy, el euro es la moneda de 19 países, se ha convertido en un símbolo de integración europea y es una divisa sólida y segura, en la que confían los ciudadanos locales e internacionales.
Pensar en una moneda común para países del Mercosur, aunque sea aún una idea incipiente puede significar un fortalecimiento de las relaciones bilaterales, y por ende, mayores ventajas para los empresarios y ciudadanos de a pie. Sin embargo, en esta primera instancia, un acuerdo con Brasil sería muy fructífero para Argentina, ya que es el país al que más productos exporta.
PRÓXIMOS PASOS PARA SUR, LA MONEDA COMÚN CON BRASIL
Tras el anuncio de la creación de una moneda común Argentina – Brasil, Sergio Massa dejó claro que aún faltan resolver varios detalles. “Habrá una decisión de comenzar a estudiar los parámetros necesarios para una moneda común, que incluye todo, desde cuestiones fiscales hasta el tamaño de la economía y el papel de los bancos centrales”, explicó el funcionario en declaraciones al Financial Times.
Además de fomentar las transacciones de comercio internacional entre ambos países, la moneda común Sur tendrá algunas particularidades. Según detallaron desde el Ministerio de Economía, Sur contaría con una compensación a 90 días, que incluiría también el comercio de servicios. En esa línea, también se contempla un acuerdo entre los bancos públicos de ambas naciones para financiar proyectos de infraestructura, inversiones, importaciones y exportaciones.
Asimismo, no se descarta un posible Swap entre pesos y reales para así fortalecer las reservas y compensar los déficit comerciales que puedan existir en la balanza de pagos. Para Argentina, esto implicaría dejar de gastar dólares de las reservas para el pago de importaciones provenientes de Brasil.
Si bien este proyecto es de larga data, todo parece indicar que hay amplio consenso y predisposición para avanzar a paso firme. Aunque los primeros acuerdos se han generado entre Argentina y Brasil, el propio Lula insiste en la importancia de crear una moneda para toda la región porque considera que “no tenemos que depender más del dólar”. Y en este sentido, a Argentina no podría estar más de acuerdo.
El presidente Alberto Fernández junto a Lula da Silva
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